Iluminación Urbana: La asignatura pendiente

blog-urbana-01
blog-urbana-02

Iluminación Urbana: La asignatura pendiente

Introducción al Plan Director de Iluminación Urbana (PDI), a las necesidades que este cubre y las bases que debe contener.

ORÍGENES

El año 2015 fue el “Año internacional de la luz”. Por tal motivo fueron muchos los eventos que  se organizaron y no menos los trabajos que se publicaron para dejar constancia de que la luz ha tenido y tiene una incidencia muy relevante en  muchos de los desarrollos científicos y técnicos que más impacto han tenido en la sociedad a través de los tiempos, incluyendo, en primer lugar, el propio origen y desarrollo de la vida de los seres vivos  en el Planeta Tierra.

Hoy queremos centrarnos en la importancia de la luz  en el día a día de la vida las personas, pero atendiendo fundamentalmente a sus efectos y evitando siempre  al máximo las explicaciones técnicas complejas de los fenómenos implicados.

Analizaremos en primer lugar  la importancia que la luz tiene en los espacios públicos, el alumbrado público, como nexo de unión del hombre con su entorno a través del órgano de la vista.  Es fundamental saber cómo deberíamos  iluminarlos, durante la noche,  para intentar optimizar los efectos en todas aquellas funcionalidades que se consideren de interés en los mismos.

El hombre ha tenido, desde el principio, regulada su actividad en torno a la luz, asociada a los  ciclos  del día y la noche, del sueño y la vigilia. La posibilidad de producir luz artificial, a partir sobre todo de la electricidad, marcó  el inicio de grandes  avances tecnológicos y del incremento de la productividad, al poder flexibilizar y ampliar la jornada laboral.  Aumentaba  así la presencia de la luz en todas las facetas de la vida y de forma muy especial las relacionadas con las comunicaciones y la interacción del ser humano con su entorno. Hoy se estima que cerca del 90% de la información que el hombre recibe del exterior  tiene lugar a través  del órgano de la vista que, como todos sabemos, sólo funciona cuando hay luz.

La luz es, por otra parte,  un elemento fundamental del diseño arquitectónico y urbanístico de una ciudad. Gracias a ella, el ojo capta las imágenes  que proyecta en la retina y que son las verdaderas portadoras de la información que precisa procesar el cerebro para transmitirnos las sensaciones que nos  ayudan a dar significado a las cosas: la forma, el tamaño, la orientación, el color y la textura como componentes básicos de cualquier composición. La luz es, en definitiva, la esencia misma de los espacios y por tanto del arte, de la arquitectura y del paisaje.

Durante el día, el Sol con sus variaciones de intensidades,  direcciones,  tonos y matices nos dicta como percibir estos espacios, condicionando de forma importante,  el   confort y las  funcionalidades  de algunos entornos, indiferente a nuestros esfuerzos por mejorarlos. Al llegar la noche, sin embargo, la arquitectura y la  ingeniería ganan esa batalla, y el alumbrado público, integrado con el resto del mobiliario urbano, puede hacer mucho más dóciles esos entornos para adaptarlos a las actividades  que se hayan valorado como prioritarias en los mismos y crear las condiciones apropiadas para proporcionar una estimulación completa de los sentidos.

Share this post

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *